Se va
Hace unos meses, uno de los hombres de mi vida, mi abuelo se marchaba, nos dejaba y yo me quedaba desolada. Estaba enfermo, pero poco a poco iba superando los escollos que la salud le iba poniendo. El día que murió estuve con el, le hacían una prueba y me despedí de el como
siempre, con un beso ( aunque antes de irme mi instinto me decía que debía darle otro y así fue). Nos fuimos y por la tarde cuando nadie se lo esperaba, su corazón dejaba de latir. Y dejaba el mio roto en mil pedazos. A mi me costó entenderlo, si yo me había despedido y lo había dejado bien. Me repetía muchas veces. Me costó asimilar que ya no lo tendría cerca de mi, que ya no lo podría abrazar y llamarlo como cariñosamente le decía, Yeyo. Estuve mucho tiempo con ira porque mucha gente me había decepcionado pero en los peores momentos te das cuenta que valor tienen lo que se quedan contigo. Estuve un tiempo también como anestesiada, como si no me diese cuenta de lo que pasaba, no asimilaba su marcha. Lo estaba pasando mal, para poder estar tranquila con todo a mi alrededor y conmigo misma. Un día fui a visitar a un familiar al hospital y decidí que tenía que ir a su habitación, donde el estaba... y lo hice, como dolió ver a otra persona en su cama, como me faltaba el aire y como sentí que me rompía...pero lo necesitaba. Necesitaba darme cuenta de que ya no estaba y poder seguir adelante. Hoy lo echo muchísimo de menos, paso por su habitación, miro sus cosas y se me humedecen los ojos. Lo quise, lo quiero y siempre lo querré. Era muy especial nuestra relación de nieta y abuelo, por eso siempre estará en mi corazón, SIEMPRE.He sido muy afortunada de tenerlo como abuelo. Hoy hace 6 meses que ya no está. Pero se que desde donde esta me cuida.
Para terminar el post, les pongo una canción muy bonita, es una versión de Luz de luna de Chavela Vargas, cantada por Asier Etxeandía. El decía, que desde que se marchó su madre, la luna no ha vuelto a brillar y para mi también significa lo mismo... desde que el se fue, ya nada es lo mismo, ni la luna brilla ni el sol...
siempre, con un beso ( aunque antes de irme mi instinto me decía que debía darle otro y así fue). Nos fuimos y por la tarde cuando nadie se lo esperaba, su corazón dejaba de latir. Y dejaba el mio roto en mil pedazos. A mi me costó entenderlo, si yo me había despedido y lo había dejado bien. Me repetía muchas veces. Me costó asimilar que ya no lo tendría cerca de mi, que ya no lo podría abrazar y llamarlo como cariñosamente le decía, Yeyo. Estuve mucho tiempo con ira porque mucha gente me había decepcionado pero en los peores momentos te das cuenta que valor tienen lo que se quedan contigo. Estuve un tiempo también como anestesiada, como si no me diese cuenta de lo que pasaba, no asimilaba su marcha. Lo estaba pasando mal, para poder estar tranquila con todo a mi alrededor y conmigo misma. Un día fui a visitar a un familiar al hospital y decidí que tenía que ir a su habitación, donde el estaba... y lo hice, como dolió ver a otra persona en su cama, como me faltaba el aire y como sentí que me rompía...pero lo necesitaba. Necesitaba darme cuenta de que ya no estaba y poder seguir adelante. Hoy lo echo muchísimo de menos, paso por su habitación, miro sus cosas y se me humedecen los ojos. Lo quise, lo quiero y siempre lo querré. Era muy especial nuestra relación de nieta y abuelo, por eso siempre estará en mi corazón, SIEMPRE.He sido muy afortunada de tenerlo como abuelo. Hoy hace 6 meses que ya no está. Pero se que desde donde esta me cuida.Para terminar el post, les pongo una canción muy bonita, es una versión de Luz de luna de Chavela Vargas, cantada por Asier Etxeandía. El decía, que desde que se marchó su madre, la luna no ha vuelto a brillar y para mi también significa lo mismo... desde que el se fue, ya nada es lo mismo, ni la luna brilla ni el sol...
Un vídeo de Diandra Nhur
